En la industria de la forja, los ensayos no destructivos (END) son un paso crucial para garantizar la calidad y la fiabilidad de los productos forjados. Dado que las forjas se utilizan ampliamente en la energía eólica, la petroquímica, la maquinaria de minería, la construcción naval y la metalurgia, su integridad interna afecta directamente al rendimiento y la seguridad de los equipos industriales.
Durante la forja, pueden producirse defectos como cavidades de contracción, inclusiones, grietas y manchas blancas. Estos defectos son invisibles a simple vista, pero pueden causar fallos graves en los equipos si no se detectan. Los ensayos ultrasónicos (UT), los ensayos con partículas magnéticas (MT) y los ensayos con líquidos penetrantes (PT) se aplican comúnmente para detectar defectos internos y superficiales, garantizando la solidez y la durabilidad.
Los END no solo son un requisito del cliente, sino también una parte obligatoria de las normas internacionales de calidad como ASTM A388, EN 10228 y JB/T 5000. Una inspección estricta garantiza el cumplimiento y protege las aplicaciones de uso final.
Elegir forjas que han pasado END exhaustivos significa elegir fiabilidad, seguridad y un rendimiento duradero.
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